Eterno Simoncelli
El malogrado piloto sigue vivo en Misano, que luce su nombre
"Marco estaría orgulloso de lo que estamos haciendo". Esto dice Paolo
Simoncelli, padre del piloto fallecido hace casi un año y cuya imagen
está por toda la región que rodea el circuito Misano Adriático, ahora
rebautizado como Marco Simoncelli.
La imagen es sólo el reflejo del alma, del espíritu latente entre unos vecinos que no olvidan a su ídolo. En particular, en Coriano, el pueblo donde vivía; Riccione, dónde está su Fundación y vivían muchos colegas; Tavullia, el pueblo de su ídolo-amigo Valentino Rossi, y Misano, dónde se encuentra la nave de su ex equipo, Gresini, y el trazado en el que creció.
Escuelas hasta en Haití
Sic, como persona, adoraba ayudar a los niños y siempre se prestaba a colaborar en causas humanitarias. Así, heredera de ese altruismo, nació la Fundación Marco Simoncelli.
El dinero ingresado de venta de camisetas o productos de Pippo sumado a lo que se subasta de donaciones como la Gilera con la que ganó el título de 250cc o la Honda de 800cc con la que corrió en MotoGP se destina a centros para gente desfavorecida. Quien más se ocupa de todo es Kate, la novia de Marco, que incluso viajó a Haití a comprobar la gestión de una escuela.
«Marco amaba hacer este tipo de labores humanitarias en su tiempo libre. Con las aportaciones de todo el mundo estamos ayudando a mucha gente», explica Paolo, en la Fundación, situada en Riccione. Allí, un grafitero, de noche, pintó su homenaje en un muro de una calle. Nadie se atrevió a tocarlo.
Unos padres orgullosos
El progenitor de SuperSic mantiene esa increíble serenidad que mostró en aquellos dramáticos días de hace 11 meses. Él y su mujer, Rosella, están abrumados por los mensajes de apoyo recibidos. «Para nosotros significa mucho el calor y los ánimos de los fans y amigos. Hoy nos hemos dado cuenta de que Marco forma parte de la leyenda. De corazón, sólo puedo decir gracias», indica.
Paolo afirma que le sorprendió que Stoner se acordara de su hijo al anunciar su retirada. Lo dice porque está pendiente de MotoGP, aunque en la distancia. El matrimonio no ve las carreras ni en directo ni por televisión. Sólo hicieron una excepción al acudir a Mugello al recoger la Honda RC212V que los regaló HRC. «Todavía no nos sentimos preparados para acudir a los circuitos», refrenda.
El pueblo del guerrero
Simoncelli nació en Cattolica, aunque él nunca se sintió de allí. De hecho, en esa localidad apenas hay recuerdos de él. Su casa estaba en Coriano. También la iglesia de Santa María de la Asunción, dónde fue el funeral. Estos días los vecinos han colocado un mural para que la gente lo recuerde. Una corona de flores sobre un 58 y varias pancartas alfombran el templo. Todo el pueblo está plagado de carteles con su cara y su número con lemas como «No te olvidaremos nunca» o «Simoncelli, siempre serás nuestro campeón».
El libro de la alcaldesa
En la pequeña localidad todos amaban a su león. «Coriano estaba en el corazón de Marco y Marco está en nuestros corazones. No sólo representaba la tenacidad, el talento, el coraje o la intuición. También, la esperanza, la lealtad, la bondad y una gran humanidad», dice Virgina María Rizzo, la alcaldesa, que recopiló en un libro titulado Un guerrero bello por dentro, los días posteriores al fallecimiento y en los que todo el mundo miró a Coriano.
Fieles a ese deseo por perpetuar su memoria, el ayuntamiento logró el permiso necesario para saltarse una ley de 1927, de los tiempos de Mussolini, según la cual no se puede dedicar un monumento a alguien hasta que hayan pasado 10 años. Ellos lograron que «por ser una persona especial» hubiera una derogación sólo para que su Palacio de los Deportes se llame 'Marco Simoncelli'. Allí un artista, éste con permiso, realizó un gran mural de recuerdo.
Sic, en San Siro
En Coriano también están parte de sus amigos de toda la vida. Ellos, unidos a otros fans, crearon un grupo llamado 58boys, que promueve acciones para recordarlo. Así, ellos insistieron y convencieron al Milan para que hiciera un homenaje a Pippo. Así, se pudo ver en San Siro una camiseta rossonera con el 58 y el nombre de Sic. Marco era un gran aficionado al fútbol y hasta estuvo tentado de dedicarse a ello profesionalmente.
Los sentimientos de Gresini
Cerca del circuito se encuentra la nave del equipo Gresini Racing, en el que corría Simoncelli. En todos los camiones que viajan por el mundo hay que lo recuerdan y su número está presente. Está ubicada en la calle Daijiro Kato, nombre que rememora al japonés fallecido 10 años antes. «Serán días de fuertes emociones. Será muy difícil, pero espero que los pilotos honren su nombre. Estoy seguro de que todos darán el máximo porque el recuerdo de Marco está siempre muy vivo entre nosotros y él nos ayudará a lograr un milagro», comenta emocionado Fausto Gresini, el nombre que vivió las dos muertes como jefe de equipo.
Carrera de motocarros y rock
Precisamente, Gresini promueve cada año una fiesta llamada DediKato, para acordarse del nipón. En esta edición, también estará presente la memoria de Simoncelli. Se iba a desarrollar ayer en el 'Arena 58' de Misano, pero la lluvia lo aplazó hasta mañana. En ella se combinarán dos de las pasiones de Sic: motor y rock. Varios pilotos, como Bautista, Pasini o Rossi, periodistas y amigos competirán en distintas carreras. La más sorprendente, una de motocarros. A Pippo siempre le encantaron estos antiguos vehículos de tres ruedas tan populares en Italia.
La música correrá a cargo de The Rainband, el grupo que es telonero de Simple Minds, y que dedicó una canción a Marco llamada Rise again, que se vende en iTunes para recaudar fondos para la Fundación. Es más la guitarra de su líder, Martin Finnigan, firmada por todos los pilotos de MotoGP, será subastada en breve.
Ciclismo en pista
El epicentro del recuerdo a Simoncelli será el circuito que ya lleva su nombre. El Mundial había preparado un sencillo homenaje ayer: todos los pilotos rodaron en bici dando una vuelta en su honor. El diluvio hizo que surgieran dudas, pero los pilotos se empeñaron en salir. Ellos también sienten el vacío. «Cuando vienes y cuando ves el nombre del circuito sientes más su ausencia. Estaría bien hacer una carrera por él», comenta Rossi, con gesto serio.
Todos coinciden en que fue un acierto que Misano se llame también circuito Marco Simoncelli. «Es bueno que le cambiaran el nombre, él vivía cerca. Ver tanta gente con su camiseta y lo que sienten compensa un poco los sentimientos que tenemos nosotros», decía Pedrosa. Lorenzo está en la misma línea: «Merecía que se cambiara el nombre. Era una de las estrellas, movilizaba mucha gente. Siempre se le recordará. A él y a Tomizawa, también fallecido aquí».
"Marco estaría orgulloso de lo que estamos haciendo". Esto dice Paolo
Simoncelli, padre del piloto fallecido hace casi un año y cuya imagen
está por toda la región que rodea el circuito Misano Adriático, ahora
rebautizado como Marco Simoncelli.La imagen es sólo el reflejo del alma, del espíritu latente entre unos vecinos que no olvidan a su ídolo. En particular, en Coriano, el pueblo donde vivía; Riccione, dónde está su Fundación y vivían muchos colegas; Tavullia, el pueblo de su ídolo-amigo Valentino Rossi, y Misano, dónde se encuentra la nave de su ex equipo, Gresini, y el trazado en el que creció.
Escuelas hasta en HaitíSic, como persona, adoraba ayudar a los niños y siempre se prestaba a colaborar en causas humanitarias. Así, heredera de ese altruismo, nació la Fundación Marco Simoncelli.
El dinero ingresado de venta de camisetas o productos de Pippo sumado a lo que se subasta de donaciones como la Gilera con la que ganó el título de 250cc o la Honda de 800cc con la que corrió en MotoGP se destina a centros para gente desfavorecida. Quien más se ocupa de todo es Kate, la novia de Marco, que incluso viajó a Haití a comprobar la gestión de una escuela.
«Marco amaba hacer este tipo de labores humanitarias en su tiempo libre. Con las aportaciones de todo el mundo estamos ayudando a mucha gente», explica Paolo, en la Fundación, situada en Riccione. Allí, un grafitero, de noche, pintó su homenaje en un muro de una calle. Nadie se atrevió a tocarlo.
Unos padres orgullosos
El progenitor de SuperSic mantiene esa increíble serenidad que mostró en aquellos dramáticos días de hace 11 meses. Él y su mujer, Rosella, están abrumados por los mensajes de apoyo recibidos. «Para nosotros significa mucho el calor y los ánimos de los fans y amigos. Hoy nos hemos dado cuenta de que Marco forma parte de la leyenda. De corazón, sólo puedo decir gracias», indica.
Paolo afirma que le sorprendió que Stoner se acordara de su hijo al anunciar su retirada. Lo dice porque está pendiente de MotoGP, aunque en la distancia. El matrimonio no ve las carreras ni en directo ni por televisión. Sólo hicieron una excepción al acudir a Mugello al recoger la Honda RC212V que los regaló HRC. «Todavía no nos sentimos preparados para acudir a los circuitos», refrenda.
El pueblo del guerreroSimoncelli nació en Cattolica, aunque él nunca se sintió de allí. De hecho, en esa localidad apenas hay recuerdos de él. Su casa estaba en Coriano. También la iglesia de Santa María de la Asunción, dónde fue el funeral. Estos días los vecinos han colocado un mural para que la gente lo recuerde. Una corona de flores sobre un 58 y varias pancartas alfombran el templo. Todo el pueblo está plagado de carteles con su cara y su número con lemas como «No te olvidaremos nunca» o «Simoncelli, siempre serás nuestro campeón».
El libro de la alcaldesa
En la pequeña localidad todos amaban a su león. «Coriano estaba en el corazón de Marco y Marco está en nuestros corazones. No sólo representaba la tenacidad, el talento, el coraje o la intuición. También, la esperanza, la lealtad, la bondad y una gran humanidad», dice Virgina María Rizzo, la alcaldesa, que recopiló en un libro titulado Un guerrero bello por dentro, los días posteriores al fallecimiento y en los que todo el mundo miró a Coriano.
Fieles a ese deseo por perpetuar su memoria, el ayuntamiento logró el permiso necesario para saltarse una ley de 1927, de los tiempos de Mussolini, según la cual no se puede dedicar un monumento a alguien hasta que hayan pasado 10 años. Ellos lograron que «por ser una persona especial» hubiera una derogación sólo para que su Palacio de los Deportes se llame 'Marco Simoncelli'. Allí un artista, éste con permiso, realizó un gran mural de recuerdo.
Sic, en San Siro
En Coriano también están parte de sus amigos de toda la vida. Ellos, unidos a otros fans, crearon un grupo llamado 58boys, que promueve acciones para recordarlo. Así, ellos insistieron y convencieron al Milan para que hiciera un homenaje a Pippo. Así, se pudo ver en San Siro una camiseta rossonera con el 58 y el nombre de Sic. Marco era un gran aficionado al fútbol y hasta estuvo tentado de dedicarse a ello profesionalmente.
Los sentimientos de Gresini
Cerca del circuito se encuentra la nave del equipo Gresini Racing, en el que corría Simoncelli. En todos los camiones que viajan por el mundo hay que lo recuerdan y su número está presente. Está ubicada en la calle Daijiro Kato, nombre que rememora al japonés fallecido 10 años antes. «Serán días de fuertes emociones. Será muy difícil, pero espero que los pilotos honren su nombre. Estoy seguro de que todos darán el máximo porque el recuerdo de Marco está siempre muy vivo entre nosotros y él nos ayudará a lograr un milagro», comenta emocionado Fausto Gresini, el nombre que vivió las dos muertes como jefe de equipo.
Carrera de motocarros y rockPrecisamente, Gresini promueve cada año una fiesta llamada DediKato, para acordarse del nipón. En esta edición, también estará presente la memoria de Simoncelli. Se iba a desarrollar ayer en el 'Arena 58' de Misano, pero la lluvia lo aplazó hasta mañana. En ella se combinarán dos de las pasiones de Sic: motor y rock. Varios pilotos, como Bautista, Pasini o Rossi, periodistas y amigos competirán en distintas carreras. La más sorprendente, una de motocarros. A Pippo siempre le encantaron estos antiguos vehículos de tres ruedas tan populares en Italia.
La música correrá a cargo de The Rainband, el grupo que es telonero de Simple Minds, y que dedicó una canción a Marco llamada Rise again, que se vende en iTunes para recaudar fondos para la Fundación. Es más la guitarra de su líder, Martin Finnigan, firmada por todos los pilotos de MotoGP, será subastada en breve.
El epicentro del recuerdo a Simoncelli será el circuito que ya lleva su nombre. El Mundial había preparado un sencillo homenaje ayer: todos los pilotos rodaron en bici dando una vuelta en su honor. El diluvio hizo que surgieran dudas, pero los pilotos se empeñaron en salir. Ellos también sienten el vacío. «Cuando vienes y cuando ves el nombre del circuito sientes más su ausencia. Estaría bien hacer una carrera por él», comenta Rossi, con gesto serio.
Todos coinciden en que fue un acierto que Misano se llame también circuito Marco Simoncelli. «Es bueno que le cambiaran el nombre, él vivía cerca. Ver tanta gente con su camiseta y lo que sienten compensa un poco los sentimientos que tenemos nosotros», decía Pedrosa. Lorenzo está en la misma línea: «Merecía que se cambiara el nombre. Era una de las estrellas, movilizaba mucha gente. Siempre se le recordará. A él y a Tomizawa, también fallecido aquí».
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